En occidente uno de los puntos más llamativos sobre el hinduismo es la veneración que estos les tienen a las vacas. Para muchos amantes de la carne esto es algo muy peculiar y difícil de comprender. Lo cierto y lo concreto es que en la India las vaquitas son sagradas de una manera distinta que en estos lugares.
La vaca cumple en Occidente una función fundamental con la ganadería y la producción láctea. Además, es la responsable de que tengamos el mejor plato de todos como es el asado, así que su veneración al otro lado del mundo como una divinidad resulta incomprensible, más aún en un país como la India, que sufre de la inseguridad alimentaria.
En la India la vaca es venerada como fuente de alimento, símbolo de la vida y jamás debe ser matada, sin embargo no se realizan rituales de adoración a las vacas, no se les tienen consideraciones.
En la localidad de Gopastami, la fiesta anual que venera a las vacas, se centra en un baño que se les realiza, decorando el templo dedicado a ellas con ofrendas para que su vida continúe.
Además muchos dicen que la India la vaca es más un tabú, no una divinidad sagrada de su cultura.
En la antigüedad, los hindúes sacrificaban toros y se comían su carne, pero a las vacas productores de leche no se las podía tocar. Los textos sagrados nombraban a la vaca como Devi (la diosa) y Aditi (madre de los dioses).
Durante la época del jainismo y el budismo, se dejó de comer carne por razones prácticas y espirituales, ya que era caro sacrificar las vacas a los dioses, mientras que si se las dejaba vivir producen un montón de alimentos provenientes de su leche, además de combustible de su estiércol.
Inclusive la veneración de la vaca en la India era tan fuerte que en la época del jainismo se decía que matar a una vaca era tan grave como matar a una brahmán, el sacerdote de mayor casta en al religión hindú.
En los textos mitológicos de la India a la vaca se lo representa como la madre tierra, esto se debe a que la vaca es un animal que alimenta con su leche a todos, haya tenido o no cría. Cuando la tierra fue contaminada por los demonios, la madre tierra se presentó ante el Señor Supremo en forma de vaca, pidiendo la salvación de la humanidad, según las escrituras hindúes.
En la actualidad los hindúes no comen carne y cada familia cuenta con una vaca lechera, a quien trata como si fuese un miembro más de la familia. Los productos que ofrece la leche de la vaca se utilizan hasta en oraciones y ritos de penitencia extrema.
Ahora ya tenemos más idea del porque las vacas son sagradas en la India, sin duda esta es una costumbre que muchas personas no entenderían, pero que cuenta con fundamentos muy razonables por parte de una cultura milenaria que tal vez no comprenda nuestra fascinación por disfrutar del asado cada domingo. Una actividad que tampoco está lejos de ser sagrada.