La música juega un papel importante dentro de cualquier reunión social y más aún en un asado. Es tan infaltable como la carne o las cervezas bien frías, por eso acá te traemos una selección de discos para cada momento y lugar en que hagas tu asado.
La música comienza a sonar antes de que empecemos a realizar cualquier cosa, es la excusa perfecta para poder despabilarnos y empezar a organizar lo que será nuestro asado, y desde ahí no va a parar hasta que alguien pulse stop e invite a todos a ir a dormir. Por eso, parafraseando al gran fílósofo alemán Friedrich Niezstche, “Sin música, el asadacho sería un error”, te traemos estos discos esenciales que no pueden faltar en tu parrilla.
1- Para un Asado en el Campo – Cosmos Factory, Creedence Clearwater Revival – 1971
Más de uno se habrá criado musicalmente escuchando a los Creedence, infaltable en los asados de nuestros viejos. Las canciones de la banda lidera por John Fogerty nos permite evocar los fantásticos paisajes del campo, el rocío del pastizal, el aroma a tierra mojada, las vaquitas, las vaquitas en las brasas y el aire puro de la intermperie. Si vas a hacer un asado en el campo, no te olvides de llevar este añejado y rústico discazo.
El asado siempre es un punto de referencia para una reunión entre antiguos compañeros y es ahí donde tenemos una buena excusa para volver a recordar buenos momentos con este genial primer disco del trio argentino. Un albúm sin desperdicios y lleno de energía, especial para aquellos estan con ganas volver a los mejores años de la juventud.
Para esos días calurosos en donde disfrutamos de un buen asado antes de tirarnos a la piletita, deberíamos poner lo que para muchos es el mejor disco de los Fabulosos Cadillacs, editada en la época de mayor éxito para la banda, nadie se queda indiferente cuando suena un clásico como “Mal Bicho” y más aún cuando el verano incita a la diversión.
El álbum anticarnívoros por excelencia este discazo lanzado por la banda británica lidera por Morrissey. Albúm especial para aquellos que se reúnen a asar verduras, frutas, semillas y tambíen charlar sobre gatitos. Con esto The Smiths convirtió al vegetarianismo a toda una generación de fans, que a pesar de no compartir con nosotros un buen asado, nadie puede negar sus excelentes gustos musicales.
Si estás pensando en hacer un asado para dos y te querés lucir románticamente, pero sin ser pesado y empacharle a tu novia con los pocos originales cantantes latinos, entonces este discazo de Marvin Gaye será tu gran aliado. Let’s Get It On es un clásico que siempre trae resultados positivos con nuestras buenas inteciones. Prepará una excelente colita cuadril, elegí el mejor vino, pone una luz suave el ambiente y deja que Marvin haga el resto. Será tu noche campeón.
Hay veces que durante, o luego de un asado surge un momento Stone, donde algún invitado aparece con un inesperado condimento que tienta a todos. Para esos instantes fugaces de felicidad el compañero ideal es el genial Tío Bob. Catch a Fire fue el albúm que se encargó de poner en el mapa al reggae y en especial a Bob Marley, así que este es un buen material para recordarlo en esos momentos de risas y buena vibra.
Siempre existen las personas que quieren disfrutar de un buen asado con todas las letras, un buen corte, una buena cocción, un buen vino, guarniciones espectaculares y charlas estimulantes, todo bajo el tenue sonido de uno los mejores discos que parió el jazz, Kind of Blue. Podríamos nombrer otros albúmes y artistas dentro del género, pero mejor comenzamos por lo básico y lo más esencial, el gran talento del trascendental Miles Davis.